Buscar este blog

martes, 16 de septiembre de 2008

Medias verdades


Me ha llamado poderosamente la atención un texto que se ha propuesto para los alumnos, se titula 'el sabio y el rey'.

Un rey pide interpretación a una pesadilla sufrida : sueña conque ha perdido todos sus dientes.
Al pedir una interpretación un primer sabio le predice que todos sus parientes morirán antes que su excelencia. Tras ajusticiarlo debidamente, pide a otro sabio su parecer.
Éste, precavido, predice ' su majestad sobrevivirá a todos sus allegados'.
El rey, agradecido, lo recompensa ampliamente.

La moraleja que se extrae del cuento - literal - es :
' La verdad puede compararse con una piedra preciosa. Si la lanzamos contra el rostro de alguien puede herir, pro si la envolvemos en un delicado papel y la ofrecemos con ternura, ciertamente será aceptada con agrado...'

Veamos otro análisis alternativo de la situación que hace Antonio Damasio en su libro 'El error de descartes'

'Es más probable que un paciente prefiera un tratamiento si se le dice el 90 % de los tratados con él siguen vivos pasados cinco años, que si se le dice que el 10 % murieron.'Aunque el resultado es es exactamente el mismo es probable que los sentimientos que despierta la idea de la muerte lleven a rechazar una opción que se adoptaría si la elección se hubiera construido de otro modo; esto es, en otras palabras una inferencia inconsistente e irracional.'

En mi opinión la verdad no debería depender de cómo la expresemos, de hacerlo, es nuestra capacidad para interpretarla - nuestra lógica - lo que falla como oyente y nuestra capacidad para la tergiversación la que funciona al enunciarla.
Inducir a equívocos mediante un enunciado es una capacidad muy explotada desde ámbitos políticos pero no una práctica beneficiosa ( para el que la sufre sobre todo ;)

No hay comentarios: